La catalpa es un bonito árbol caducifolio con una copa bastante amplia. Con hojas grandes y verdes, y unas flores blancas que brotan en racimos, se trata de una planta muy interesante para cultivar en un jardín.
Crece a un ritmo que, sin ser demasiado alto, sí que permite ver notables cambios de año en año. Además, es capaz de vivir en distintos microclimas, siempre que se encuentre en una región donde las cuatro estaciones estén diferenciadas.
¿Qué planta es la catalpa?
Catalpa bignonioides ‘Aurea’
La catalpa, cuyo nombre científico es Catalpa bignonioides, es un árbol caducifolio natural del sudeste de los Estados Unidos que alcanza los 15-20 metros de altura. Tiene un tronco casi siempre recto de hasta 1 metro de diámetro, y una copa muy ramificada compuesta por hojas grandes, de hasta 30 centímetros de ancho por 20 centímetros largo aproximadamente. Estas tienen el haz glabro y el envés tomentoso.
Sus flores brotan durante la primavera, brotando de un tallo floral ramificado que forma una panícula, la cual es terminal; es decir, se muere en cuanto ya no es necesario, algo que sucede cuando los frutos finalizan su maduración o cuando las flores no polinizadas se marchitan y caen. Dichas flores son blancas, y el fruto es una cápsula alargada, parecida a una legumbre o vaina, que mide unos 30 centímetros de largo pero puede llegar a los 50 centímetros.
Las semillas son aladas, miden 2-4 centímetros y son de color marrón claro-beige. Tienen una viabilidad corta, por lo que se tienen que sembrar lo antes posible para lograr que germinen.
Cuidados de la catalpa
¿Cómo se ha de cuidar la catalpa? Si quieres comprar una, o lo acabas de hacer, y quieres proporcionarle los mejores cuidados, entonces te recomendamos que tengas presente los siguientes detalles:
Ubicación
Se ha de tener en el exterior para que sienta el paso de las estaciones y sepa, así, cuándo crecer, florecer, o reposar hasta que regrese la primavera. Además, es aconsejable que le dé el sol directamente durante buena parte del día, pero tolera la semisombra sin problemas.
Por sus raíces no has de preocuparte, puesto que no son invasivas. De todas maneras, no tienes que plantarla junto a una pared, pues de lo contrario su tronco se inclinará hacia el lado opuesto en busca de más espacio para su copa. Para evitar esto, hay que dejar una separación de unos 4 o 5 metros como mínimo entre la planta y el muro.
Tierra
- Jardín: la catalpa crece en suelos fértiles. Ten presente que teme el encharcamiento, de manera que si la tierra es muy compacta tendrás que mezclarla con algún sustrato poroso, como el pómice (en venta aquí) o la arlita (en venta aquí).
- Maceta: si la vas a cultivar en maceta una temporada, puedes usar sustrato universal, o mantillo con un 30% de perlita (en venta aquí).
Riego
La catalpa es un árbol que necesita agua, no de manera frecuente, pero sí constante. No es una planta que soporte la sequía, por lo que no sería buena idea cultivarla en una región donde llueve poco. De hecho, debería de recibir agua (sea por la lluvia o por el riego) al menos unas 3 veces por semana durante el verano, y el resto del año como su ritmo de crecimiento baja considerablemente bastará con una o dos veces por semana.
En base a esto, es importante conocer el clima de la zona en la que vivimos, o como mínimo saber cuándo suele llover para ajustar el calendario de riego que debemos seguir.
Abonado
Se ha de abonar durante toda la temporada vegetativa, es decir, desde primavera hasta comienzos del otoño, utilizando abonos orgánicos, como el humus de lombriz (en venta aquí), el estiércol de gallina (seco) o de vaca, compost.
Si la tenemos en maceta recomiendo usar abonos líquidos, como el guano en forma líquida (en venta aquí), o fertilizantes como el universal (en venta aquí) o el de plantas verdes (en venta aquí).
Multiplicación
Imagen – Flickr/Olive Titus
La catalpa se multiplica por semillas durante la primavera, y también por esquejes semi-leñosos en verano. Por semillas es relativamente fácil, pues solo hay que sembrarlas en una maceta o, mejor, en una bandeja forestal, con sustrato universal (en venta aquí), regar y poner en un lugar soleado.
Los esquejes seleccionados han de ser de ramas de un año de edad, que empiecen a lignificar pero que aún sigan siendo bastante tiernas. Además, han de medir unos 40 centímetros de largo, y su base se ha de impregnar con hormonas de enraizamiento (en venta aquí) para conseguir que enraícen. Luego, se plantan en macetas con vermiculita (en venta aquí) previamente regada, y se mantienen en semisombra.
Poda
No es aconsejable podar, ya que la catalpa podría perder parte de su belleza natural. Quizás quitarle las ramas que estén rotas o tengan mal aspecto, pero nada más. Esto se puede hacer a finales del invierno.
¿Cuándo plantar la catalpa?
Se puede plantar en suelo o cambiar de maceta a finales del invierno, cuando veas que las yemas empiezan a hincharse o un poco antes. Has de hacerlo con cuidado, procurando no manipular mucho las raíces. De este modo, podrá recuperarse mejor del trasplante y, por consiguiente, reanudará su crecimiento antes.
Plagas y enfermedades
Es muy, muy resistente. Pero puede tener pulgones, cochinillas y hongos como el oídio o el Polyporus, el cual suele llegar al interior del árbol a través de heridas de podas. Las plagas se tratan con insecticidas específicos, y los hongos con fungicidas (en venta No se han encontrado productos.) pero también regando solo cuando sea necesario y manteniendo a la planta bien cuidada.
Rusticidad
Soporta las heladas de hasta los -15ºC, y las temperaturas altas de 35-38ºC si dispone de agua. Puede vivir en zonas donde las heladas son débiles.
¿Qué te ha parecido la catalpa?